¿Fiscalía o policía?

02-01-2009

¿Fiscalía o Policía?

La Policía que nos cuida, que sin buscar loas ha sabido hacer del Ecuador un país de paz durante mucho tiempo, y que no la hemos sabido ver en su perfecto desempeño por deméritos que se le han achacado aprovechando la psicología del ecuatoriano de creer imperfecto y corrupto todo lo propio. Cuando la corrupción ha abundado en el Estado Ecuatoriano no por una policía imperfecta sino por un sistema legal entrabado y deficiente.

Qué país ha logrado ser un país de no violencia pese a la pobreza gracias a la desarticulación de bandas. Y cómo hemos llegado a ver el entorpecimiento del narcotráfico al interior del país gracias a la acción inteligente y detentora de toda una inteligencia y acción precisa de la Policía Nacional.

Fiscalía…fiscalía. Ahora veo al Gobierno publicitando y exhortando a los ciudadanos a acudir a realizar las demandas a “La Fiscalía”. Queriendo volverla receptora y tramitadora inmediata de resoluciones y acciones… Siendo la fiscalía de un estado la Hacienda Pública o sea los bienes públicos. Queriendo transformarla en administradora inmediata –siendo los miembros de la Fiscalía actuantes del Ejecutivo – y dirimente de la dirección de los bienes públicos a los demandantes o demandados a voluntad de esta fiscalía, incluidos bienes como el de la fuerza pública. Prescindiendo no solo de la inteligencia investigativa independiente de la policía sino también incluyendo en el ejecutivo al tercer poder del Estado.

Logrando convencer al público de que es algo bueno, por poder echar de mano la tonta fama de ineficiencia de la Policía Nacional. Aprovechando una mezcla de opinión pública que sabe de coimas a los oficiales de tránsito y que cree en ineficiencia contra la delincuencia. La relativísima ineficiencia contra la delincuencia (y digo relaativísima porque es un país de menor violencia que otros a pesar de la pobreza que empuja hacia la violencia y el delito) se halla en un sistema legal entrabado, y no en la policía; la cual cuando el sistema legal no le impide actuar, actúa impajaritablemente, con mecanismos de investigación y de transmisión de consignas sigilosos y eficientísimos; cosas que esta Fiscalía no lograría sino en un mundo de fantasía.

Clara Placencia